❤️📖DMC LEE: Una poderosa demostración de fe
La narración bíblica de Jesús caminando sobre el mar es uno de los milagros más asombrosos que se encuentran en los Evangelios (Mateo 14:22-33, Marcos 6:45-52 y Juan 6:16-21).
Después de haber alimentado milagrosamente a una multitud con solo unos pocos panes y peces, Jesús instó a sus discípulos a que subieran a la barca y se adelantaran al otro lado del Mar de Galilea (también conocido como el Lago de Genesaret), mientras él despedía a la gente. Una vez que la multitud se dispersó, Jesús subió a la montaña para orar a solas.
Mientras tanto, los discípulos estaban en medio del mar. Se hizo de noche, y un fuerte viento comenzó a soplar, levantando olas y dificultando enormemente su avance. Remaron con gran esfuerzo durante varias horas, luchando contra la tormenta, y la barca era azotada por las olas. Estaban agotados y probablemente llenos de temor.
Ya en la cuarta vigilia de la noche (es decir, entre las tres y las seis de la mañana), cuando los discípulos estaban en lo más álgido de su lucha contra la tormenta, Jesús se dirigió hacia ellos. Pero no lo hizo de la manera convencional. Para la sorpresa y el terror de los discípulos, Jesús vino hacia ellos caminando sobre la superficie del agua.
Al verlo acercarse, los discípulos se aterrorizaron. Pensaron que era un fantasma o una aparición espectral. Gritaron de miedo, pues la oscuridad de la noche, la ferocidad de la tormenta y la incomprensible visión los llenaron de pánico.
En medio de sus gritos de terror, Jesús les habló con calma, disipando su miedo: ¡Tengan ánimo; soy yo, no teman! En la versión de Mateo, ocurre un episodio adicional muy conocido. Pedro, impulsado por una mezcla de fe y audacia, le respondió: "Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas." Jesús le dijo: "Ven." Pedro, con una fe asombrosa, salió de la barca y comenzó a caminar sobre el agua para ir hacia Jesús. Por un momento, lo hizo. Pero, entonces, al ver la fuerza del viento y las grandes olas que lo rodeaban, Pedro sintió miedo. Su fe flaqueó, y comenzó a hundirse.
Gritó: "¡Señor, sálvame!" Inmediatamente, Jesús extendió su mano, lo tomó y le dijo: "¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?"
Cuando Jesús y Pedro subieron a la barca, el viento se calmó instantáneamente. El milagro no fue solo caminar sobre el agua, sino también calmar la tormenta. Los discípulos, asombrados, se postraron ante Jesús y exclamaron: "Verdaderamente eres Hijo de Dios". Habían sido testigos de un poder extraordinario, una clara demostración de fe de Jesús.
RECOMENDAMOS:
❤️📖 DMC LEE: El sermón del monte y las enseñanzas de Cristo
🤔 Has leído, últimamente, algún libro de la biblioteca escolar, o uno que conseguiste prestado, o que te compraste? O has leído publicaciones de este Blog del Plan Lector?
🌟💎 Compártenos tus comentarios en el siguiente enlace
https://planlectordmc.blogspot.com/p/comentarios-de-nuestros-lectores.html
Comentarios
Publicar un comentario